Hoy volvemos con otra receta, en este caso de un postre que podríamos considerarlo uno de los más clásicos y que seguro que todos hemos comido alguna que otra vez. Hacer una tarta de manzana casera es muy sencillo, ya que necesitamos ingredientes sencillos y de fácil acceso. Y el alimento estrella de esta tarta: la manzana. Recordar que hace algunos post hablamos de las propiedades de esta fruta que encontramos en el supermercado practicamente durante todo el año. Pódeis ver este post aquí. Seguir nuestros pasos y conseguiréis una tarta de manzana casera muy sabrosa, que sin duda estará mejor que comprarla ya hecha.
Ingredientes (para una tarta/4-6 personas)
- 5 o 6 manzanas Reineta (las verdes) aproximadamente, depende de la cantidad que queramos que tenga la tarta
- 100 gramos de mantequilla
- 6 cucharadas soperas de leche (mejor desnatada para no añadir más grasa)
- 6 cucharadas soperas de harina
- 6 cucharadas de azúcar
- 1 cucharada sopera de mermelada de melocotón
Elaboración (Tiempo estimado: 40 minutos)
El primer paso es coger un bol o recipiente en el que podamos batir la mezcla con al batidora. Cuando ya tengamos el recipiente adecuado, pelamos 5 manzanas (dejamos una manzana para decorar) y las troceamos en trozos. Junto con los trozos de manzana, añadimos al bol la leche, la harina y el azúcar. Batimos con la batidora hasta que quede homogéneo y con el menor número de grumos posible.
Una vez tengamos la mezcla bien batida, buscamos un molde para tartas (da igual la forma que tenga), y repartimos en la base la mantequilla para que la tarta no se pegue al molde cuando esté cocinada. Cuando tengamos extendida toda la mantequilla, volcamos la mezcla batida y lo repartimos para que cubra todo el molde.
Pelamos la manzana que hemos apartado al principio para decorar y la troceamos en láminas muy finitas. Estas láminas las ponemos por toda la tarta, como vemos en la foto de arriba. Cuando hayamos terminado, metemos el molde en el horno y dejamos que se haga unos 30 minutos a 150 grados. Pero 5 minutos antes de que se termine de hacer (cuando veamos que le queda poco para hacerse del todo), la sacamos, le añadimos la mermelada de melocotón (puede ser de otro sabor) por toda la superficie para darle más sabor. Después volvemos a meterla en el horno para que se termine de hacer.
Pasado este tiempo, ya tenemos la tarta de manzana casera lista para trocearla y servir en platos. Podemos acompañarla de helado de vainilla, que le va muy bien por el sabor. Sólo nos queda disfrutar de este postre tan rico, sencillo, casero y sano, ya que la manzana es una fruta llena de vitaminas y propiedades muy saludables para nuestro organismo. Una opción que no debemos desaprovechar si queremos sorprender a nuestros invitados o simplemente para animar cualquier día de la semana.
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